Tener pensamientos negativos nos suele ocurrir de forma automática sin que ni siquiera nos demos cuenta de que estamos involucrados en este hábito tóxico. Nuestros cerebros tienden a funcionar en piloto automático repitiendo los mismos patrones de pensamiento una y otra vez. Muchas personas sienten que no tienen influencia sobre estos pensamientos pero en realidad tienen mucho poder para cambiarlos.
En pocas palabras, los pensamientos negativos son capaces de paralizarte e impedir que vivas una vida feliz y saludable. Sabemos que en el mundo de hoy pensar de forma positiva las 24 horas del día y los siete días de la semana no es nada realista pero puedes hacer el esfuerzo en cambiar algunos de los pensamientos negativos o creencias limitantes para que tengas una visión más optimista de tu vida.
El cerebro es ciertamente una máquina compleja y los científicos todavía están intentando entender por qué tenemos pensamientos negativos y de donde vienen. Sin embargo, basados en nuestro conocimiento actual sabemos que PODEMOS cambiar nuestra forma de pensar.
En este artículo encontraras una lista de los pensamientos más tóxicos que podrías posiblemente tener y ver el tipo de impacto que estos hacen en tu vida. Espero que esto te ayude a prestar más atención a tus patrones de pensamiento y corregirlos si es necesario.
10 pensamientos negativos o creencias limitantes que debes eliminar de tu vida
1. No soy suficientemente bueno
Nadie ha nacido siendo bueno en algo, todos hemos tenido que estudiar y practicar una y otra vez para conseguir dominar aquello en lo que nos hemos esforzado. Si tienes alguna área en la que quieras mejorar, establece una meta y trabaja todos los días para que puedas conseguirlo. Pero recuerda que el amor propio y la auto-aceptación son una parte vital de tu felicidad.
Éste es definitivamente un pensamiento que debes lanzar a la basura o por lo menos no lo creas cuando entre en tu mente. El mundo constantemente nos dice que tenemos que ser de una cierta manera para tener fama, éxito, amor, felicidad, admiración, etc. pero a la única persona que necesitas dar explicación al final del día es a ti mismo.
2. No tengo ningún propósito en la vida
Una vez más, este es un pensamiento común para muchos de nosotros pero es uno que puede desgarrarnos por dentro si nos centramos demasiado en él. Si sientes que no tienes un propósito en la vida entonces debes mirar primero tus aficiones e intereses. ¿Podría uno de ellos quizás llevarte a conseguir tu propósito? ¿Podrías pasar más tiempo haciendo las cosas que amas y eventualmente convertirlo en una carrera?
También debes considerar que tal vez tengamos múltiples propósitos en la vida y no debemos sólo enclaustrarnos pensando que debemos seguir buscando esa gran misión que tenemos que cumplir. Todos podemos especular sobre nuestro propósito final pero nadie sabe realmente por qué vinimos aquí. Lo único que sabemos es que estamos aquí ahora mismo y tenemos que aprovecharlo de alguna manera. Haz aquello que te haga sentir vivo y no te estreses preocupándote por lo que otros puedan pensar.
3. No valgo para nada
En el mundo de hoy estamos bajo una inmensa presión por parte de nuestros jefes, familiares, amigos e inclusos de otras personas. Tenemos tanto peso que llevar sobre nuestros hombros debido a todas estas responsabilidades que cuando fallamos en algo puede ser muy fácil para nosotros sentirnos inútiles. Si decepcionamos a nuestro jefe o a nuestra familia, nuestro ego y autoestima pueden soportar un fuerte golpe dejándonos un sentimiento de fracaso.
Sin embargo, sólo recuerda que nadie es perfecto, todos cometemos errores de vez en cuando y esto es parte de la vida. Deja de ser tan duro contigo mismo y aprende a recompensarte por tus logros y simplemente mira tus fracasos como oportunidades de mejorar.
4. La vida es muy difícil
Confía en mí, no eres el único que se siente de esta manera. Millones, incluso miles de millones de personas probablemente sientan lo mismo. Sin embargo, la vida se trata en gran medida de superar los problemas que nos vamos encontrando. Ten en cuenta que nuestros cerebros no pueden procesar demasiados problemas simultáneamente, así que concéntrate en el problema que tienes más a mano y luego pasa al siguiente.
Escribe tus metas, ve a por ellas y no te coloques ningún límite a ti mismo. La vida sólo es difícil si lo haces así y si crees que lo es. Haz que tu vida sea como tú quieres que sea, ríe en los buenos tiempos y aprende de los tiempos difíciles. Esta es realmente la única manera para que cualquiera de nosotros podamos permanecer (algo) sanos en este mundo loco.
5. No seré feliz hasta que…
¡Detente! No intentes terminar esta oración porque la felicidad se puede tener aquí y ahora mismo si te permites sentirlo. ¿Te sientes un cabizbajo? Pon tu música favorita, llama a un viejo amigo, realiza cualquier afición que tengas o simplemente come un par de bolas de helado. La vida es demasiado corta para embotellar tu felicidad y sólo permitirte sentirlo cuando se cumplan ciertas condiciones.
Por ejemplo, ¿Qué pasaría si dijeras “no seré feliz hasta que me mude a una ciudad diferente”? Entonces ¿Vivirías en un estado de miseria hasta que lo consigas? Te estás engañando a ti mismo si caes en este patrón de pensamiento tóxico. Debes ser capaz de ver lo bueno que hay en tu vida en este momento y estar agradecido por ello porque un día mirarás hacia atrás y desearías haberte sentido más feliz mientras vivías.
6. Es demasiado tarde para cambiar mi vida
Esta es una creencia limitante que muchas personas la repiten una y otra vez pero te voy a profetizar algo: no tendrá un final feliz. Por lo tanto elimina este pensamiento ya que no necesitas este tipo de negatividad en tu vida. Si quieres hacer un cambio en tu vida, solo tú puedes hacer que eso suceda. Nunca es tarde para conseguir todo lo que deseas, por lo tanto olvídate de la idea de que eres demasiado viejo, demasiado torpe o demasiado de cualquier cosa que creas que te impida transformar tu vida. Cada día en el que despertamos significa una oportunidad para hacer algo diferente.
7. No estoy listo.
Si constantemente te dices que no estás listo, nunca estarás listo. El cambio puede ser aterrador pero si estás dispuesto a arriesgarte, los resultados podrían ser bastante sorprendentes. La creencia de que no estás listo es lo que te está reteniendo, así que empieza a creer en lo contrario y ve lo que sucede ya que eres la única persona que se interpone en tu camino. Debes estar dispuesto a dar un salto de fe de vez en cuando y tal vez te alegrarás de haberlo hecho.
8. No tengo tiempo
Ninguno de nosotros realmente tiene mucho tiempo ya que el día solo tiene 24 horas pero podemos reservar un tiempo para lo que necesitamos conseguir. Si deseas lograr un sueño, se necesitará tiempo para llegar desde el punto A al punto B. Se necesita sangre, sudor y lágrimas para llegar allí y tienes que estar dispuesto a poner un poco de sacrificio y dejar de colocar excusas para ver los resultados. Si realmente quiere algo debes establecerlo como una prioridad y asignar algún tiempo para trabajar exclusivamente en las cosas que realmente te importan. No dejes que tu edad ni el tiempo impidan transformar su vida.
9. No le gusto a nadie
Sentirte como un forastero puede ser solitario y doloroso. Pero es importante recordar que primero tienes que aceptarte a ti mismo antes de que alguien más lo pueda hacer. No busques la aprobación de nadie sino de ti mismo. Las personas adecuadas eventualmente llegarán y te amarán por lo que eres con tus peculiaridades y cualidades únicas.
10. Mis objetivos son imposibles de alcanzar
Tus sueños son imposibles si crees que lo son; recuerda que tu mente tiene un poder inmenso y no debes permitir que dicte tu futuro a través de un pensamiento negativo. Claro, tu objetivo final podría estar a años de distancia pero se puede alcanzar mediante el establecimiento de pequeños hitos y pronto alcanzaras todas las metas que te hayas propuesto.
